XXXII Domingo del
Tiempo Ordinario C (Lucas 20, 27-38)
En la disputa de Jesús
con los saduceos a cuenta de la Resurrección, se nos vuelve a mostrar que el
verdadero sentido de las Escrituras sólo se alcanza a la luz de Jesucristo.
Los saduceos eran
creyentes pero habían reducido la acción de Dios a un horizonte terrenal, ignorando la
Resurrección. Su planteamiento de la
viuda de siete hermanos es un artificio que pretende justificar una posición
previamente adoptada.
Frente a ello
encontramos en las Escrituras el caso de
otra viuda y otros siete hermanos: los
que dieron su vida por una admirable
fidelidad a la Ley y una inquebrantable confianza en la vida eterna.
Con todo, la respuesta definitiva nos viene de Jesús,
aludiendo al episodio bíblico de la zarza ardiendo:
Dios de Abrahán, Isaac, Jacob… Dios de vivos, no de
muertos.
(fuentes: revista
Magníficat, Taco-calendario del Corazón de Jesús)
Lecturas de la Misa de este Domingo.
This Sunday´s
Holy Mass Readings
No hay comentarios:
Publicar un comentario