DIARIO DE NAVARRA NOS RECUERDA CUANDO CAMBIÓ LA TRASERA DEL COLEGIO

CUANDO CAMBIÓ Avenida Zaragoza /Abejeras

A.O. Pamplona  9 de diciembre de 2022.

EL importante desnivel que existe entre los barrios de Iturrama y Milagrosa lo ha solventado el Ayuntamiento de la capital navarra con la construcción de escaleras, primero, y más recientemente con ascensores urbanos. La diferencia de cotas oscila entre los 7 y los 11 metros dependiendo de si se toma como referencia un extremo u otro de la calle Abejeras, de donde parte el desnivel. En el año 1972 el consistorio se decidió a urbanizar un estrecho paso de 5 metros de anchura situado entre dos edificios de la calle Abejeras y por el que los vecinos accedían a la calle Río Ega y sustituyó la piedra y la grava por unas escaleras. Unos años después, en los 80 del siglo pasado, la operación se repetía a la altura de la calle Buenaventura Íñiguez para unir el desnivel de algo más de 7 metros con unas amplias escaleras, que ya en este siglo fueron complementadas con una rampa mecánica.

En 1998 otro conjunto de escaleras iba a crear un nuevo acceso entre la calle Abejeras y la avenida de Zaragoza, a la altura del colegio de Santa Catalina, un espacio hasta entonces sin urbanizar que separaba el centro escolar de un edificio residencial. Con una anchura de 10 metros y un desnivel de 7, el nuevo paso contaba con 8 tramos de escaleras y obligó a construir sendos muros para separar el límite con el colegio y con el edificio. Además se dotó al nuevo espacio peatonal con arbolado, bancos, barandillas e iluminación, con un presupuesto final de casi 30 millones de pesetas. Las escaleras se estrenaron en la primavera de 1999. La última actuación municipal para solucionar el desnivel entre los dos barrios se ejecutó en dos fases. Primero, con motivo de la construcción del túnel que unía el tráfico entre la calle Erletokieta y la avenida de Zaragoza, se construyó en 2002 un grupo de escaleras al que dos años más tarde se le sumó el primer ascensor urbano de la capital.

1998

2022

A la izquierda el colegio Santa Catalina y a la derecha el edificio de viviendas situado en el número 3 de la calle Abejeras. En mitad, una parcela sin uso en la que se iban a construir las nuevas escaleras. ARCHIVO/CALLEJA