XVIII
Domingo del Tiempo Ordinario (ciclo A)
( Mateo 14, 13-21)
Dios alimento, Dios ánimo, Dios
consuelo. Las lecturas de este Domingo echan por tierra la errónea imagen de Dios como un ser resentido y
vengador. Dios es simple y llanamente, todo lo que necesitamos.
En el
pasaje de la Multiplicación de los panes y los peces -auténtico anticipo
de la Eucaristía- Jesús nos lleva a
conocer su corazón, y el corazón de Dios, porque Jesús es como su Padre, o su
Padre como Él, y en Jesús le conocemos.
“Nada podrá apartarnos del amor de Dios
manifestado en Jesucristo”.
(Fuente:
Taco-Calendario del Corazón de Jesús)